1. Siempre que digo “madre” voy diciendo tu nombre, siempre que pido ayuda, te estoy llamando a ti, siempre que siento gozo es que en ti estoy pensando, con tu nombre en los labios me acostumbro a dormir (bis) Siempre que digo “madre”, es que digo María, siempre que digo “madre” voy cantando tu amor, digo tu nombre y nombro a mi mejor amiga María, madre mía, y madre del Señor María, madre mía, y madre del Señor 2. Siempre que yo te canto, es mi canto esperanza, siempre que yo te rezo, es himno mi oración, siempre que yo te hablo, es mi voz alabanza y tu nombre yo llevo siempre en mi corazón (bis) 3. Siempre que tengo dudas, en ti encuentro certeza, siempre que tengo miedo, eres tú mi valor, siempre en mis desalientos, eres tú mi confianza y tu nombre yo invoco como ayuda y favor. (bis)